Seres vivos de récord

Para qué negarlo: al ser humano le gusta creerse la especie más privilegiada y destacada que la evolución ha producido en la Tierra. Sin embargo, en la mayor parte de nuestras características somos una especie bastante modesta y los números 1 se los llevan otros seres vivos.

Así que vamos a hacer una cura de humildad y vamos a recopilar seres vivos que baten récords en alguna característica. Yo comienzo con una propuesta y vosotros contestáis proponiendo algún otro récord que os llame la atención.

El ser vivo más alto del mundo

Como no podía ser de otra forma el ser vivo más alto del mundo es un árbol. Es una sequoya situada en el Parque Nacional Redwood, en la costa norte de California, y mide 115,55 m (bueno, al menos medía eso cuando lo descubrieron 2006). Lo han bautizado con el nombre de Hiperión (un titán de la mitología griega). Es 21 m más alto que la estatua de la libertad de Nueva York.

¿Siguiente récord?

Te toca a tí. Propón el ser vivo de récord que te parezca más interesante. ¡No vale repetir!

Sobre gatos, ballenas y murciélagos

Ya sabes, por lo que has estudiado en clase, que los seres vivos son al mismo tiempo parecidos entre sí y muy diferentes. Todos los seres vivos comparten características comunes y, al mismo tiempo, todos presentan diferencias entre ellos.

Esta doble característica de unidad y diversidad se manifiesta a todos los niveles y hoy os traigo un ejemplo curioso.

Evidentemente cualquiera puede distinguir un brazo humano, una pata de un gato, la aleta de una ballena o el ala de un murciélago. Son bastante diferentes ¿verdad?. Sin embargo, si observas con atención su interior, descubrirás que comparten exactamente la misma estructura de huesos (fíjate en los diferentes colores del dibujo).

Enigma

¿Podrías explicar por qué tiene que haber diferencias entre estos miembros de seres vivos? ¿Y por qué sin embargo, se parecen tanto en su estructura ósea?

Si no lo tienes del todo claro, puedes ver el siguiente video, que quizá te de alguna pista (comienza justo donde puede interesarte, así que prepárate).

Vida en la oscuridad

Siempre habrás escuchado que la luz es la base fundamental de la vida en la Tierra. Gracias a la fotosíntesis de las plantas, la luz es usada para transformar las sutancias inorgánicas simples (H2O, CO2) en sustancias más complejas que pueden servir de alimento a los animales. Si los organismos que realizan la fotosíntesis desaparecieran, los ecosistemas se derrumbarían en poco tiempo por falta de alimento.

Pero hay un  lugar de la Tierra donde todo lo anterior no se cumple. En el fondo de los océanos existe un tipo de ecosistemas que a pesar de estar en total oscuridad a kilómetros de profundidad, están rebosantes de vida, poblados por criaturas extrañas.

Es una demostración de que la vida tiene una capacidad sorprendente de superar dificultades y adpatarse a condiciones aparentemente imposibles.

Echa un vistazo al siguiente video y resuelve el enigma:

 

Enigma

¿Dónde existen estos ecosistemas exactamente?¿Cómo se las apaña la vida para salir adelante sin luz en estos lugares?

Extremófilos: En los límites de la vida

Hace algún tiempo, hablamos en clase de que el planeta Tierra poseía las características perfectas (temperatura, composición, gravedad, etc.) para que la vida pudiese desarrollarse, como si nuestro planeta estuviera hecho a medida para los seres vivos.

En realidad llegábamos a la conclusión contraria: es la vida la que está hecha a medida de la Tierra, adaptándose a ella mediante los mecanismos de evolución biológica. Y como las condiciones de la Tierra son bastante estables, la mayor parte de los seres vivos sólo puede sobrevivir en unas condiciones de temperatura, presión, salinidad, etc. muy concretas… Pero no siempre es así.

Noticias sobre el origen de la vida

Ya sabes que la vida no existió en la Tierra hasta unos mil millones después de formarse. En el comienzo las condiciones de nuestro planeta eran incompatibles con la vida. No había agua líquida y la temperatura en la superficie era de unos cientos de grados.

Por tanto, la vida debió formarse en la Tierra a partir de estructuras no vivas. ¿Cómo pudo suceder esto? La respuesta definitiva sigue sin alcanzarse, pero se barajan varias posibilidades.

Una de ellas, aunque parezca un poco de película, es que las primeras sustancias precursoras de los seres vivos son de origen extraterrestre  y llegaron «a bordo» de meteoritos o cometas.

Recientemente, el análisis de un meteorito que cayó en Australia en 1969 ha dado lugar a un descubrimiento importante: se han encontrado unas moléculas a partir de las cuales se fabrica el ADN de los seres vivos de la Tierra. Además, pueden demostrar que esas moléculas tienen que haberse formado fuera de la Tierra.

No hay videos de la caída de aquel meteorito, pero si quieres ver cómo llega uno a la Tierra, no te pierdas estas tomas del famoso meteorito de 2013 en Rusia. Te prevengo que puedes llevarte algún susto si tienes el volumen alto.

Los autores de la investigación defienden que quizá las primeras moléculas que dieron lugar a la vida llegaron ya formadas procedentes de otras partes del Universo, y una vez en la Tierra fueron copiándose y asociándose hasta dar lugar a la vida. Si esto es verdad, esas mismas moléculas podrían haber llegado a otros planetas y , por tanto, sería fácil que la vida se hubiera originado en otros muchos planetas.

¿Será verdad que no estamos «solos» en el Universo?

Enigma

¿Por qué los investigadores están seguros de que las moléculas encontradas venían ya formadas en el  meteorito y no se han formado aquí en la Tierra?

Lee este artículo corto de la revista Muy Interesante, descúbrelo y resuelve el enigma.